La OMS ha declarado el coronavirus como pandemia mundial después de que el virus se propagara desde el foco inicial en la ciudad china de Wuhan a países de todos los continentes. Actualmente hay un elevado número de contagiados, ingresados y fallecidos; demasiada información que no siempre es veraz; y algunos grupos de riesgo definidos, entre los que destacan las personas en edad avanzada y aquellas inmunodeprimidas.
Ante esta situación, los pacientes con cáncer, quienes como consecuencia de determinados tratamientos o de la propia enfermedad pueden tener el sistema inmunológico debilitado, experimentan sentimientos de gran incertidumbre, angustia y temor: ¿Soy más vulnerable ante la infección por coronavirus? ¿Puede el virus empeorar mi cáncer? ¿Van a suspender mi tratamiento debido a la crisis sanitaria? ¿Tengo que tomar medidas de protección añadidas a las del resto de la población? ¿Qué debo hacer en caso de presentar síntomas?
Desde la Fundación Sandra Ibarra queremos ofrecer datos claros de lo que se sabe hasta ahora del coronavirus o SARS-CoV2, causante de la infección respiratoria COVID-19, en relación a los pacientes oncológicos, así como las medidas de prevención más necesarias y efectivas que aplicar en estos días.
Según indica la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), hasta ahora no hay evidencia del comportamiento del SARS-CoV-2 en la población oncológica, pero es posible que los pacientes sometidos a un tratamiento oncológico inmunosupresor puedan tener una mayor susceptibilidad al mismo y una mayor incidencia de complicaciones asociadas que la población general, tal y como ocurre con otras infecciones virales respiratorias como la gripe.
No existe evidencia de que el virus empeore la propia patología tumoral y en muchos casos se manifiesta con síntomas leves. Sin embargo, en los pacientes con cáncer podría darse un cuadro clínico más severo, cuya gravedad podría verse incrementada si se asocian otros factores como la edad avanzada o la presencia de patologías previas.
Este mayor riego de complicaciones obliga a seguir las recomendaciones para evitar el contagio de forma particularmente estricta por parte de los pacientes con cáncer. Según destacan la Sociedad Española de Inmunología (SEI) y la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), algunas de las más importantes son:
- Es especialmente importante permanecer en casa. Evitar salir a la calle en la medida de lo posible, y delegar en otras personas actividades como la compra o acudir a la farmacia.
- Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón al menos durante 20 segundos, o bien con un desinfectante para manos a base de alcohol (con al menos 60% de alcohol). Especialmente después de ir al baño, antes de comer, después de sonarse la nariz, toser o estornudar, y después del contacto directo con otras personas
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca antes de lavarse las manos.
- Debe realizarse una limpieza regular de las superficies de la casa.
- Emplear pañuelos desechables para toser o estornudar y tirarlos a la basura en el momento. En el caso de no disponer de ellos, al estornudar es recomendable taparse la boca con la cara interna del antebrazo y evitar hacerlo con la mano.
- Evitar el contacto personal a menos de dos metros de distancia, así como compartir con otras personas pertenencias personales.
- Seguir una alimentación saludable y equilibrada es clave para el organismo. Como ya hemos visto, el contagio de las infecciones respiratorias depende en gran medida de la fortaleza del sistema inmunológico. En esta línea, es importante evitar el consumo de tabaco y alcohol.
- Evitar compartir comida, utensilios (cubiertos, vasos, servilletas…), y otros objetos sin limpiarlos debidamente.
- El uso de mascarilla se recomienda para pacientes que presenten síntomas respiratorios sospechosos
Igualmente SEOM ha establecido algunas medidas a seguir para evitar las visitas hospitalarias de los pacientes oncológicos en la medida de lo posible:
Tratamientos
Respecto a los tratamientos, se recomienda valorar loe beneficios y riesgos de continuar o aplazarlos, ha explicado Javier de Castro, miembro de la Junta Directiva de SEOM y Jefe de Oncología del Hospital La Paz de Madrid.
En los casos tratados con quimioterapia, se intensificará la vigilancia del paciente y se estudiará, caso por caso, si se pueden alargar los ciclos o modificarlos.
Ante los tratamientos de inmunoterapia, también se propone alargar el tiempo entre una sesión y otra si el paciente está respondiendo adecuadamente.
Con las terapias orales dirigidas, las denominadas terapias diana contra el tumor, en pacientes controlados y con respuesta positiva se intenta que no tengan que pisar el hospital ya que los servicios de farmacia del centro les pueden facilitar los medicamentos.
Consultas
En algunos hospitales también se han adoptado otras medidas como aplazar las consultas de revisión de pacientes que ya finalizaron los tratamientos y a los que se les atiende por teléfono sin necesidad de acudir a la consulta.
En el caso de las consultas telemáticas, que ya se llevaban a cabo antes de la crisis sanitaria del coronavirus, SEOM apunta que es necesaria la autorización previa del paciente, el registro de la consulta en la historia clínica y la implementación de los circuitos necesarios para la citación de pruebas diagnósticas y la prescripción sin que el paciente haya de acudir al centro hospitalario.
También se considera necesario limitar a uno por paciente el número de acompañantes en salas de espera de consultas así como en las salas de quimioterapia, con las excepciones que el personal sanitario considere.
Cáncer de pulmón y coronavirus
Dentro del colectivo de pacientes oncológicos, los afectados por cáncer de pulmón tienen mayor riesgo de contagio por un coronavirus que provoca neumonía y dificultades respiratorias graves.
El Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) aconseja que se limite la exposición de estos pacientes en el ámbito hospitalario, haciendo uso de la teleconsulta cuando sea posible, así como que se realice una evaluación para detectar de forma precoz casos de coronavirus en los afectados por tumores pulmonares.
GEPC asegura que ya existen casos reportados por especialistas chinos de pacientes con cáncer de pulmón y coronavirus que han superado la infección vírica.
Presencia de síntomas
En caso de que un paciente presente síntomas como fiebre, tos, dolor de garganta y/o de cabeza o dificultad respiratoria, debe consultar con su médico especialista (la mejor opción es vía telefónica si su situación lo permite) indicando claramente la situación como enfermo de cáncer, así como cualquier otra patología crónica y los tratamientos que sigue.
El médico le preguntará por sus síntomas, dónde ha estado en los últimos días y con quién ha tenido contacto. El paciente debe seguir sus instrucciones y recordar que la asistencia a urgencias debe quedar reservada a los pacientes con síntomas graves.
Atención psicooncológica
Varias asociaciones que centran su trabajo en la suma de esfuerzos frente a distintos tipos de cáncer están ofreciendo estos días asesoramiento psicológico gratuito dirigido a pacientes, por vía telefónica u online.
Algunas de ellas son la Asociación de Afectados por Cáncer de Ovario y Ginecológico (ASACO), que ofrece sesiones de psicooncología por Skype, previa cita en el teléfono 618 067 320 o el correo electrónico info@asociacionasaco.es; o la Asociación Española de Afectados por Cáncer de Pulmón (AEACaP) que ofrece atención psicológica en el teléfono 608 717 552.
FUENTES:
https://seom.org/otros-servicios/noticias/207909-recomendaciones-seom-sobre-la-infeccion-por-coronavirus-sars-cov-2
https://seimc.org/contenidos/documentoscientificos/recomendaciones/seimc-rc-2020-SARS-CoV-2-Inmunodeprimidos.pdf
https://www.efesalud.com/coronavirus-cancer-pacientes-hospitales
https://www.20minutos.es/noticia/4191891/0/que-precauciones-deben-tener-los-pacientes-con-cancer-ante-el-coronavirus/
