Juan Ramón Lucas y Sandra Ibarra presentan en Valladolid el proyecto ‘Diario de vida’

Noticias FSI

Esta iniciativa busca «visibilizar a los supervivientes del cáncer y su problemática

El periodista madrileño Juan Ramón Lucas y Sandra Ibarra, presidenta de la Fundación que lleva su nombre, presentaron en la noche de hoy en el Museo Patio Herreriano de Valladolid el proyecto ‘Diario de vida’, una iniciativa de la Fundación que busca crear «un foro de encuentro, que permita visibilizar a los supervivientes del cáncer y sus problemas cotidianos, que suelen ser bastante comunes», según explicó en declaraciones a Ical el periodista.

Con el nombre Escuela de Supervivientes, esta iniciativa pretende ser «un ejemplo que ayude a la gente que se enfrenta a una situación similar», además de convertirse en «un foro de diálogo en torno a los supervivientes, donde participen todos los agentes y actores de la sanidad», en palabras de Lucas.

La punta del iceberg del proyecto es el libro ‘Diario de vida’ (Planeta, 19,95 euros), una innovadora publicación que reúne los testimonios vitales de 27 supervivientes del cáncer, entre ellos la joven estudiante vallisoletana Patricia Choya, que empezó su tratamiento con los 16 años recién cumplidos.

«Con este libro nos queremos parar, hablar, mirar, escuchar a los supervivientes y después actuar. Queremos dibujar un mapa que les sirva a los que vienen detrás para viajar de la mejor manera posible, sin tropezar en los mismos lugares y que cada experiencia sea más positiva que la anterior, dejando y compartiendo lo mejor de nosotros mismos. Sustituir el miedo, en un principio inevitable, por una posterior aceptación de la adversidad como parte de la vida y concentrando nuestra energía en lo importante», escribe la propia Sandra Ibarra en el prólogo de la publicación.

«Vivir y escuchar las historias con los pacientes me reconcilia con el ser humano, tan capaz de lo mejor y lo peor. Me hace vivir mil vidas en una y amplificar la mía. Me siento tan viva, tan en deuda, que he llegado a agotarme», añade recalcando que, con la creación de su Fundación, convirtió «el compromiso de hacerle frente al cáncer en una forma de vida».

Juan Ramón Lucas subraya por su parte que los protagonistas del libro, con los que ha conversado durante horas en las entrevistas que se reproducen en la publicación, «se han enfrentado a la adversidad y te enseñan las cosas que son importantes en la vida: la atención al presente, el cariño a la gente que quieres, hacer los proyectos sin demorarlos, vivir intensamente el presente, la generosidad, y sobre todo ese vínculo que tenemos todos con la familia; lo que más temen es que su familia sufra». «Conversando con ellos o escuchándoles descubres el sentido de la vida de verdad y el valor de las personas que te rodean», sentencia en declaraciones a Ical.

Según explica, todos los testimonios están planteados «en positivo» porque «han sobrevivido al cáncer, pero no todos se han enfrentado a la enfermedad de la misma forma». «El libro lanza un mensaje positivo con un final feliz, porque en todos ellos el elemento común son sus ganas de vivir y que están llenos de vida, pero también hace referencias a las angustias y a los miedos que han tenido que superar», desgrana.

Sobre la recepción que está teniendo la publicación y el proyecto, subraya que los supervivientes de esta enfermedad «entienden el lenguaje que se habla en el libro y lo agradecen». «La mayoría se identifica, y hemos recibido numerosas reacciones tanto de enfermos, como de familiares que nos agradecen la labor realizada», apunta.

Entre las principales innovaciones del libro, está la inclusión de códigos QR que brindan la posibilidad de contemplar los vídeos de las entrevistas mantenidas por Juan Ramón Lucas con los 27 protagonistas. «El proyecto de ‘Diario de vida’ está pensado desde el principio como libro y como audiovisual, para hacer más cercana al lector la experiencia que relata cada una de las 27 personas que nos ha brindado su testimonio, para lanzar un mensaje de esperanza a la sociedad», concluye.

«Me gustaría morir con las botas puestas, pero las de montar»
Una prueba para detectar la recurrencia del cáncer

Entradas relaciondas

keyboard_arrow_up